JESÚS EN "AGUAS CLARAS"

 

COMENTARIO AL "DE PROFUNDIS"

Y AL "MISERERE"

 


 

#Se lee en los Macabeos que Judas con los suyos, después que capturó con la ayuda del Señor el Templo y la Ciudad, destruyó los altares y los templillos dedicados a los dioses extranjeros, y purificó el Templo.   

#cada palabra de la historia de Israel, pues que es el Pueblo elegido, tiene un significado espiritual.  

  #Destruyeron los altares y los templillos   

#Sin amor no podrá obedecerse a las diez reglas y las columnas caerían   

#después que se erigió el becerro de oro, vino la ira del Señor   

#"Y purificaron el Templo" 

  #"Y erigieron otro altar"  

  #"Y prendieron fuego con piedra y yesca"   

#Cuando hayáis llegado a este punto, podréis ofrecer sacrificios, prender el incienso, encender las luces y poner los panes.   

#Hay un altar ya entre vosotros: el nuevo.   

#"Desde este profundo abismo, donde Yo-humanidad he caído, clamo a Ti Señor.  

  #El "Miserere" comentado   

#La Buena Nueva ¡Venid! Vayamos al Señor, Yo adelante y vosotros detrás.  

#Ha llegado el Año de la Gracia Os visto de fiesta para presentaros ante el Señor   

#"He aquí las ovejas que me enviaste a buscar.  

  #Pedro habla con Jesús y Jesús le hace promesas  

  #Sabes que nací exactamente el veinticinco de Casleu  

  #¡Pobre Simón de Jonás! ¿Qué cosa te han enseñado los peces? ¿Y qué cosa el lago? Dos cosas... pero no sirven: los pescados a callar y a tener constancia.. Y el lago a tener valor y ojo en todas partes   

#Tienes todo cuanto es necesario para que seas mi "piedra". Nada te falta, nada te sobra. 

 #¿Me das a mí también un hijo?. No, Pedro. Y no te duela  

  #"Son los hijos de tu Pedro y quiero que donde yo estoy, estén ellos" y te diré: Sí, Pedro. Como tú quieras, así será Porque tú hiciste todo por Mí y Yo hago todo por ti".   

#Me llegó una piedra a los pies, mientras oraba junto a ese peñasco. En la piedra venía un pequeñísimo envoltorio con un pedazo de pergamino. Dentro del envoltorio estaba el anillo.

 


 

CLAUSURA

EN "AGUAS CLARAS"

 

LA FIESTA DE LA PURIFICACIÓN

 

HABLA JESÚS

 

"Hijos míos en el Señor, la fiesta de la Purificación está cerca, y os mando Yo, Luz del Mundo que os preparéis con lo indispensable para que la celebréis bien. La primera luz de la fiesta es la que sacaréis para todos los demás. Pues sería muy necio quien pretendiese prender muchas luces, si la suya no está encendida; y mucho más necio sería quien pretendiese iniciar su santificación con las cosas más difíciles, olvidando lo que es la base del edificio inmutable de la perfección: El Decálogo

 

SE LEE EN LOS MACABEOS

 

Se lee en los Macabeos que Judas con los suyos, después que capturó con la ayuda del Señor el Templo y la Ciudad, destruyó los altares y los templillos dedicados a los dioses extranjeros, y purificó el Templo. Después levantó otro altar, y con un pedernal prendió fuego, ofreció sacrificios, encendió el incienso, puso las candelas y panes de la proposición y luego, postrados todos por tierra, suplicaron al Señor que no les permitiese pecar más, o si, por debilidad, volviesen a hacerlo, que fuesen tratados con divina misericordia. Sucedía esto el 25 del mes de Casleu (diciembre).

 

CADA PALABRA DE LA HISTORIA DE ISRAEL

TIENE UN SIGNIFICADO ESPIRITUAL

 

Reflexionemos y apliquémonos a nosotros mismos lo referido, porque cada palabra de la historia de Israel, pues que es el Pueblo elegido, tiene un significado espiritual. La vida es siempre una enseñanza. La vida de Israel es enseñanza no sólo para los días en que se vive sobre la tierra, sino para la conquista de los días eternos.

 

"DESTRUYERON LOS ALTARES

Y LOS TEMPLILLOS"

 

He aquí la primera operación. Es la que os indiqué al nombraros los dioses individuales que sustituyeron al Dios verdadero: las idolatrías de los sentidos, del oro, orgullo, vicios capitales que llevan la profanación y muerte del alma y del cuerpo y al castigo de Dios. No os he oprimido con innumerables fórmulas que oprimen hoy por hoy a los fieles, y sirven de obstáculo a la verdadera Ley, que está oprimida, escondida con montones y montones de prohibiciones que son todas externas, que con su peso conducen al fiel a que pierda de vista la voz recta, clara y santa del Señor que dice: "No blasfemarás. No cometerás idolatría. No profanarás las fiestas. No faltarás al respeto a los padres. No matarás. No cometerás acciones impuras. No hurtarás. No mentirás. No envidiarás las cosas de los demás. No desearás la mujer ajena". Diez "no" ni uno más. Son las diez columnas del templo del alma. Arriba entre los santos brilla el oro del santo precepto: "Ama a tu Dios. Ama a tu prójimo". Es el remate de la cúpula del templo. Es la protección de los fundamentos. Es la gloria del constructor.

 

SIN AMOR NO PODRÁ OBEDECERSE

A LAS DIEZ REGLAS

 

Sin amor no podrá obedecerse a las diez reglas y las columnas caerían: Todas o algunas y el templo caería en ruinas totales o parciales. Pero siempre sufriría ruinas y no sería apto para recoger al Santísimo. Haced lo que os digo: Aplastad las tres concupiscencias. Dad un nombre claro a vuestro vicio, como claro es Dios en deciros: "No hagas esto, no hagas aquello". Es inútil ser sutiles en las formas. Quien ama con más fuerzas de las que ama a Dios, cualquiera que sea este amor, es un idólatra. Quien invoca a Dios llamándose su siervo y luego lo desobedece, es un rebelde. Quien por avidez trabaja en sábado es un profanador, uno que no tiene confianza, un presuntuoso. Quien se niega a ayudar a sus padres bajo pretextos aun cuando diga que lo que hace lo hace por Dios lo odia a Él pues tiene al padre y a la madre como retratos suyos sobre la tierra. Quien mata es siempre un asesino. Quien comete actos impuros es un lujurioso. Quien roba es siempre un ladrón. Quien miente siempre es un abyecto. Quien desea lo que no es suyo es un codicioso del hambre más execrable. Quien profana un tálamo es siempre inmundo.

 

DESPUÉS QUE SE ERIGIÓ EL BECERRO DE ORO,

VINO LA IRA DE DIOS

 

Así es. Recuerdo que después que se erigió el becerro de oro, vino la ira del Señor; después de la idolatría de Salomón, el cisma que dividió y debilitó a Israel; después del helenismo aceptado, y más bien que esto, introducido por los judíos indignos bajo Antíoco Epífanes, vinieron nuestras actuales desventuras de espíritu, fortuna y nacionalidad. Os recuerdo que Nadab y Abiú, siervos falsos de Dios, fueron heridos por Yeové. Os recuerdo que no era santo el maná del sábado. Os recuerdo a Cam y a Absalón. Os recuerdo el pecado de David contra Urías y el de Absalón contra Amnón. Os recuerdo el fin de Absalón y de Amnón. Os recuerdo la suerte de Heliodoro que era un ladrón, de Simón y de Menelao. Os recuerdo el fin vergonzoso de los dos falsos líderes que habían testificado mentirosamente en contra de Susanna. Y podría continuar sin encontrar fin a los ejemplos. Pero volvamos a los Macabeos.

 

"Y PURIFICARON EL TEMPLO"

 

"Y purificaron el Templo". No basta decir: "Destruyo". Es necesario decir: "Purifico". Os he dicho cómo se purifica el hombre: Con arrepentimiento humilde y sincero. No hay pecado que Dios no pueda perdonar, si el pecador está realmente arrepentido. Tened fe en su bondad divina. Si lograseis entender lo que significa esta Bondad, aun cuando hubieseis cometido todos los pecados del mundo, no huiríais de Dios, antes bien correríais a sus pies porque solo el Bueno por excelencia puede perdonar lo que el hombre no lo puede.

 

"Y ERIGIERON OTRO ALTAR"

 

"Y erigieron otro altar". ¡Oh! No tratéis de engañar al Señor. No seáis falsos en vuestra conducta. No mezcléis a Dios con Mammón Tendréis un altar vacío: el de Dios. Porque es inútil levantar un altar nuevo si quedan los restos del otro. O Dios o el ídolo. Escoged.

 

"Y PRENDIERON FUEGO CON PIEDRA Y YESCA"

 

"Y prendieron fuego con piedra y yesca". Piedra significa la firme voluntad de ser de Dios. La yesca es el deseo de anular, lo que resta de vida, aun el recuerdo del pasado en el pecado de haberos separado del Corazón de Dios. Sólo entonces se prende el fuego: que es amor. Porque el hijo que trata de consolar a su padre ofendido, con una vida honrada ¿qué otra cosa hace sino amar a su padre, para que éste, contento lo ame a él que en otro tiempo fue la causa de sus lágrimas y ahora de su alegría?

 

CUANDO HAYÁIS LLEGADO A ESTE PUNTO,

PODRÉIS OFRECER SACRIFICIOS

 

Cuando hayáis llegado a este punto, podréis ofrecer sacrificios, prender el incienso, encender las luces y poner los panes. Los sacrificios serán agradables a Dios, así como las plegarias. El altar en realidad estará iluminado y enriquecido con el alimento de vuestra oferta diaria. Podréis orar de este modo: "Sé nuestro protector" porque Él será vuestro amigo. Sin embargo su misericordia no ha esperado a que le pidieseis piedad. Se ha adelantado a vuestro deseo. Os ha mandado la Misericordia para deciros: Esperad. Os digo: Dios perdona. Venid al Señor".

 

HAY UN ALTAR YA ENTRE VOSOTROS:

EL NUEVO.

Hay un altar ya entre vosotros: el nuevo. De él fluyen ríos de luz y de perdón, que como aceite se extienden, curan y dan fuerzas. Creed en la palabra que procede de Él. Llorad conmigo vuestros pecados. A la manera como el levita dirige el coro, así también Yo dirijo vuestras voces hasta Dios, y no será rechazado vuestro gemido si va unido a mi voz. Me aniquilo con vosotros, hermano de los hombres según la carne, Hijo del Padre en el espíritu, y digo por vosotros, con vosotros:

 

"DE PROFUNDIS"

 

"Desde este profundo abismo, donde Yo-humanidad he caído, clamo a Ti Señor. Escucha la voz de quien se mira y suspira, y no cierres tu oído a mis palabras. Horror es el verme, ¡Oh Señor! Soy un horror aun a mis propios ojos... ¿Qué seré a los Tuyos? No mires mis culpas ¡oh Señor! porque de otro modo no podré resistir ante Ti sino más bien ten misericordia de mí. Tú lo dijiste: 'Yo soy misericordia'. Y yo creo en tu palabra. Mi alma herida y abatida, confía en Ti, en tu promesa, y desde el amanecer hasta la noche, desde la juventud hasta la vejez esperaré en Ti".

 

EL "MISERERE" COMENTADO

 

David, culpable de homicidio y de adulterio, desechado de Dios, obtiene el perdón, después de que clamó al Señor: "Ten piedad de mí, no por consideración mía, sino por honor a tu misericordia, que es infinita. Y por ella borra mi pecado. No hay agua que pueda lavar mi corazón si no se le toma de las aguas profundas de tu santa bondad. Lávame con ella de mi iniquidad y purifícame de mi inmundicia. No niego haber pecado. Aun más confieso mi delito. Y como un testigo que me echa en cara mi culpa, siempre está ante mí. Ofendí al hombre en el prójimo y en mí mismo, pero sobre todo me duele haber pecado contra Ti. Y esto sea para decirte que reconozco que eres justo en tus palabras y que temo tu juicio que triunfa sobre cualquier pecado humano. Pero considera, ¡oh Eterno! que nací en culpa, y que pecadora fue quien me concibió, y que Tú tanto me has amado que has llegado a revelarme tu sabiduría, a dármela por maestra para comprender los misterios de tus sublimes verdades. Y si has hecho tanto ¿debo de temerte?

¡No! No tengo miedo. Rocíame con la amargura del dolor y seré purificado. Lávame con el llanto y seré como la nieve de las montañas. Haz que oiga tu voz y tu humillado siervo se regocijará, porque tu voz es su gozo y alegría, aun cuando reprenda. Torna tu rostro a mis pecados. Tu mirada borrará mis iniquidades. El corazón que me diste lo profanó Satanás y mi flaqueza humana. Fórmame un nuevo corazón que sea puro, y destruye lo que hay de corrupción en las entrañas de tu siervo para que reine sólo en él un espíritu recto. Pero no me arrojes de tu presencia, ni me quites tu amistad, porque solo la salud que procede de Ti es gozo de mi alma, y tu espíritu soberano es consuelo para el que se humilla. Haz que me convierta en uno de los que vayan diciendo entre los hombres: 'Ved qué bueno es el Señor. Caminad por sus senderos y seréis benditos como yo lo soy, yo aborto del hombre, pero que ahora torno a ser hijo de Dios, por la gracia que en mí vuelve a nacer'. Y los impíos se convertirán a Ti. La sangre y la carne se rebelan y rugen dentro de mí. Líbrame de ellas, ¡oh Señor! salvación del alma mía, y cantaré tus alabanzas. No lo sabía, mas ahora lo he comprendido; no es el sacrificio de carneros lo que Tú quieres, sino el holocausto de un corazón contrito. Un corazón contrito y humillado, te es más agradable que los carneros y los machos cabríos, porque nos creaste para Ti, y quieres que nos acordemos de ello y te devolvamos lo que es tuyo. Sé benigno para conmigo por tu gran bondad y reedifica mi Jerusalén y tu Jerusalén que no es otra cosa que un espíritu purificado y perdonado, sobre el que puede ofrecerse el sacrificio, la oblación y el holocausto por el pecado, por acción de gracias y por alabanza. Y que cada nuevo día sea una hostia santa consumada sobre tu altar para que ascienda con el olor de mi amor hasta donde Tú estás".

 

LA BUENA NUEVA

 

¡VENID! VAYAMOS AL SEÑOR,

YO ADELANTE Y VOSOTROS DETRÁS

 

¡Venid! Vayamos al Señor, Yo adelante y vosotros detrás. Vayamos a las aguas salutíferas, a los pastizales buenos, vayamos a las tierras de Dios. Olvidad el pasado. Sonreíd al porvenir. No penséis en el fango, sino levantad vuestra mirada a las estrellas. No digáis: "Son tinieblas". Decid: "Dios es luz". He venido a anunciaros la paz, a anunciar a los mansos la Buena Nueva a curar a quienes tienen el corazón quebrantado por muchas cosas, a pregonar la libertad a todos los esclavos, entre los que primero se cuentan están los de Mammón, la libertad a los prisioneros de la concupiscencia.

 

HA LLEGADO EL AÑO DE LA GRACIA.

OS VISTO DE FIESTA PARA PRESENTAROS

ANTE EL SEÑOR

 

Os digo: Ha llegado el año de la gracia. Vosotros que os sentís tristes no lloréis con la tristeza de quien se siente pecador; no derraméis lágrimas, vosotros desterrados del reino de Dios. Yo sustituyo la ceniza por el oro, el aceite por las lágrimas. Os visto de fiesta para presentaros ante el Señor y decir:

 

HE AQUÍ LAS OVEJAS QUE ME

ENVIASTE A BUSCAR

 

"He aquí las ovejas que me enviaste a buscar. Las he ido a ver y las he juntado, las conté, busqué a las dispersas y te las he traído sacándolas de las nubes y de las tinieblas. Las he tomado de entre todos los pueblos, las he recogido de todas las regiones para conducirlas a la Tierra, no más tierra que les has preparado, ¡oh Padre santo! para llevarlas a las cimas paradisíacas de tus hermosos montes donde todo es luz y belleza, junto a los ríos de las beatitudes celestiales donde se sacian de Ti los espíritus de quienes amas. He ido también en busca de las heridas, curé a las fracturadas, y di fuerzas a las débiles, no dejé ni a una sola sin ver; la que estaba más desgarrada de los voraces lobos de los sentidos me la puse sobre los hombros como un yugo de amor y la deposito a los pies, Padre benigno y santo, porque ella no puede caminar más, no conoce tus palabras, es una pobre alma perseguida por los remordimientos y por los hombres, es un espíritu que deplora y tiembla, es como una ola empujada y vuelta a ser empujada por el oleaje de la playa. Viene con el deseo, la rechaza el conocimiento que tiene de sí... Ábrele tu seno, Padre que eres todo amor, para que en él encuentre paz esta creatura extraviada. Dile: 'Ven'. Dile: 'Eres mía'. Fue posesión de todo el mundo, pero ahora tiene náuseas y miedo. Dice: 'Cada patrón es un asqueroso esbirro'. Haz que pueda decir: 'Este Rey mío me ha dado el gozo de ser una presa'. No sabe qué cosa sea el amor. Pero si Tú la acoges comprenderá qué cosa es este amor celestial que es el amor de nupcias entre Dios y el espíritu humano y como un pajarito libertado de la jaula de los crueles, subirá, siempre más arriba hasta Ti, hasta el cielo, hasta el gozo, la gloria, cantando: 'He encontrado a quien buscaba. Mi corazón no tiene otro deseo. ¡En Ti reposo y me alegro, Señor eterno, por los siglos de los siglos bienaventurada!'".

Idos. Con nuevo espíritu celebrad la fiesta de la Purificación. Y la Luz de Dios se encienda en vosotros".

Jesús al final de su discurso ha estado arrebatador. Su rostro era arrebatador. Su rostro era luminoso con ojos que resplandecían. Una sonrisa y una melodía de dulzura inimaginables.

La gente como extática no se mueve, y solo lo hace cuando repite: "Idos, la paz sea con vosotros." Los peregrinos se retiran hablando entre sí.

La mujer velada se va rápida como siempre, con su paso veloz y ligeramente ondulante. El manto a sus espaldas parece como si fueran alas que el viento hincha.

 

PEDRO HABLA CON JESÚS Y JESÚS LE HACE PROMESAS

 

"Ahora comprenderé si es de Israel" dice Pedro.

"¿Por qué?"

 "Porque si se está aquí es señal de que..."

"... es una pobre mujer sin casa propia. No otra cosa. Recuérdalo bien Pedro." Jesús se dirige hacia el poblado.

"Sí, Maestro, lo recordaré... ¿Y qué haremos ahora en que todos regresan a su casa para la fiesta?"

"Nuestras mujeres prenden por nosotros las lámparas."

"Me desagrada... es el primer año que no las veré prender en la mía, o que no las prendo..."

"¡Eres un viejo niño! Prenderemos también las lámparas, así no tendrás esa cara de enfado. Y tú las prenderás."

"¿Yo? Yo no, Señor. Tú eres la cabeza de nuestra familia. Te toca a Ti."

 

¿SABES QUE NACÍ EXACTAMENTE EL VEINTICINCO DE 

CASLEU (DICIEMBRE)?

 

"Yo soy siempre una lámpara encendida... y querría que todos también así fueseis. Soy la Encenia perpetua, Pedro. ¿Sabes que nací exactamente el veinticinco de Casleu?"

"Quién sabe cuántas luces, ¿eh?" Pedro admirado pregunta.

"No se podían contar... eran todas las estrellas del Cielo..."

"¿No te hicieron fiesta en Nazaret?"

"No nací en Nazaret, sino en medio de unos escombros en Belén. Veo que Juan ha sabido quedarse callado. Es muy obediente."

"Y no es curioso... Pero... ¡yo no me aguanto! Cuéntaselo a tu pobre Simón. Sino, ¿cómo le hago para hablar de Ti? Algunas personas preguntan y no sé qué decir... Los otros saben hacerlo, me refiero a tus hermanos y a Simón, Bartolomeo y Judas de Simón. También Tomás sabe hablar... parece un pregonero de mercado... que está vendiendo sus mercancías. Pero para hablar... Mateo... ¡eh! ¡Lo hace bien! Usa su antigua sabiduría de cuando desplumaba sentado en su banco de alcabalero, para obligar a los otros a que le digan: "Tienes razón". 

 

¡POBRE SIMÓN DE JONÁS! ¿QUÉ COSA TE HAN ENSEÑADO 

LOS PECES? Y ¿QUÉ COSAS EL LAGO?

 

DOS COSAS... PERO NO SIRVEN: LOS PESCADOS A CALLAR 

Y A TENER CONSTANCIA

 

Y EL LAGO A TENER VALOR Y OJO EN TODAS PARTES

 

¡Pero yo!... ¡Pobre Simón de Jonás! ¿Qué cosa te han enseñado los peces? Y ¿qué cosa el lago? Dos cosas... pero no sirven: los pescados a callar y a tener constancia. Ellos constantes en huir de la red y yo constante en meterlos. Y el lago a tener valor y ojo en todas partes. ¿Qué cosa me enseñó la barca? A fatigarse sin dejar descansar ni un solo músculo y a estar derecho aun cuando las olas estén agitadas y pueda uno caerse. Ojo a la estrella polar, mano firme en el timón, fuerza, valor, constancia, atención. Esto es lo que ha enseñado mi pobre vida..."

 

LAS COSAS NECESARIAS PARA QUE SEAS MI "PIEDRA"

 

Jesús le pone una mano sobre la espalda, lo sacude y lo mira con afección y admiración verdadera de tanta sencillez, y dice: "¿Y te parece poco Simón Pedro? Tienes todo cuanto es necesario para que seas mi "piedra". Nada te falta, nada te sobra. Serás el navegante eterno, Simón. Y a quién venga después de Ti le dirás: "Ojo a la estrella polar que es Jesús. Mano firme en el timón, fuerza, valor, constancia, atención, tener el ojo en todo y fatigarse sin descansar y saber estar derechos aun en medio de las ondas agitadas...". En cuanto al silencio... eso si no... los peces no te lo enseñaron."

 

¿ME DAS TAMBIÉN A MÍ UN HIJO?

 

NO, PEDRO. Y NO TE DUELA

 

"Pero soy más mudo que los peces en lo que debo de decir. Las otras palabras... También las gallinas saben cacarear como lo hago yo... Pero dime, Maestro mío. ¿Me das a mí también un hijo? Somos viejos... Tú me dijiste que el Bautista nació de una mujer ya entrada en años... Ahorita me dijiste: "Y a quien venga después de ti, dirás..." ¿Quién viene después si no es el hijo?" Pedro pone una cara de súplica y de esperanza.

"No, Pedro. Y no te duela. Te pareces exactamente a tu lago cuando una nube oculta el sol. De risueño se hace oscuro. No, Pedro mío. No tendrás uno, sino miles y decenas de millares de hijos, y en cada nación... ¿No te acuerdas cuando te dije: "Serás pescador de hombres"? "

"¡Oh! Si... pero... Sería tan dulce que un niño me llamase "padre". "

 

SON LOS HIJOS DE TU PEDRO Y QUIERO QUE DONDE 

YO ESTOY, ESTÉN ELLOS" Y TE DIRÉ: 

"SI, PEDRO. COMO TÚ QUIERAS, ASÍ SERÁ. 

PORQUE TU HICISTE TODO POR MÍ 

Y YO HAGO TODO POR TI"

 

"Tendrás tantos que no los podrás contar, y a quienes darás la vida eterna. Los volverás a encontrar en el cielo y me los llevarás diciendo: "Son los hijos de tu Pedro y quiero que donde yo estoy, estén ellos" y te diré: Sí, Pedro. Como tú quieras, así será Porque tú hiciste todo por Mí y Yo hago todo por ti". " Jesús muestra una dulzura extraordinaria en estas promesas.

Pedro traga saliva, llorando la esperanza de una paternidad terrena, pero también llora de éxtasis, por lo que le anuncia. "¡Oh, Señor!" dice. "Para dar la vida eterna es menester persuadir a las almas para el bien... y estamos siempre en lo mismo: yo no sé hablar."

"Sabrás hablar, cuando llegue la hora y mejor que Gamaliel."

"Quisiera creerlo... Haz Tú el milagro, porque si yo debo hacerlo por mis propias fuerzas..."

 

ME LLEGÓ UNA PIEDRA A LOS PIES, MIENTRAS 

ORABA JUNTO A ESE PEÑASCO. 

EN LA PIEDRA VENÍA UN PEQUEÑÍSIMO ENVOLTORIO 

CON UN PEDAZO DE PERGAMINO. 

DENTRO DEL ENVOLTORIO ESTABA EL ANILLO

 

Jesús ríe de la tranquila risa de Pedro y dice: "Yo estaré siempre contigo. Vamos al poblado. A la casa de aquella viuda. Tengo una limosna secreta. Un anillo que quiero vender. ¿Sabes cómo lo obtuve? Me llegó una piedra a los pies, mientras oraba junto a ese peñasco. En la piedra venía un pequeñísimo envoltorio con un pedazo de pergamino. Dentro del envoltorio estaba el anillo. En el pergamino la palabra "caridad". "

"¿Me lo dejas ver? ¡Oh! ¡Hermoso! De mujer. ¡Qué dedo tan pequeño! ¡Cuánto oro!..."

"Ahora tú lo vendes, yo no sé cómo hacer eso. El fondista compra oro. Lo sé. Te espero cerca del horno. Ve, Pedro."

"Pero... ¿si no lo hago bien? Yo y el oro... Yo no entiendo de oro."

"Piensa que es pan para el que sufre el hambre, y haz lo mejor que puedas. Hasta pronto."

Pedro va hacia la derecha mientras Jesús, muy despacio toma la izquierda, y continúa yendo hacia el poblado que se ve un poco lejos: detrás del bosquecillo que está más allá de la casa del administrador.

II. 820-828

A. M. D. G.