"EL CORAZÓN NO ESTÁ CIRCUNCIDADO"

 


 

#LLEGA JESÚS Y CURA A UN ENDEMONIADO  

 #ACUSAN A JESÚS QUE ESTA CURACIÓN HA SIDO PREPARADA para enseñar   

#ANTE LA ACUSACIÓN QUE DIRIGEN A JESÚS LOS FARISEOS les replica: Un reino dividido en partidos contrarios se debilita. La concordia además de ser astucia mantiene libres, fuertes y solícitos los miembros. Esto deberían reflexionar los patriotas, los ciudadanos, los familiares.   

#EL REINO DE LAS TINIEBLAS   

#QUÉ QUIERES DECIR CON "PADRE DEL SIGLO FUTURO"   

#QUIEN NO ESTÁ CONMIGO ESTÁ CONTRA MÍ Y QUIEN NO recoge, desperdicia... y quien no cree esto ... peca contra el Espíritu Santo cuya palabra la dijeron los profetas, y no es mentira ni error, y debe creerse sin pretexto alguno.   

#SI AUN EL CALLAR ES OCIOSIDAD HACED MÁS BIEN ESTO que pecar con la lengua. "Maestro, se cree mejor en lo que se ve, Danos, pues, una señal para que podamos creer que eres lo que dices ser."  

 #"¿POR QUÉ DICES QUE ESTA GENERACIÓN ES ADÚLTERA y perversa ...? sois adúlteros, habéis rechazado el matrimonio sobrenatural con la Ley divina y os habéis casado, en una segunda unión adúltera, ...   

#LLEGA SU MADRE CON SUS PRIMOS MUY ENOJADOS a ver a Jesús. ¿Quién es mi madre? ¿Quienes son mis hermanos? ... Los que hacen la voluntad de Dios son mis hermanos y hermanas, son mi madre. No tengo otros. ...

 


 

Es el mismo lugar de la visión anterior. Jesús se despide de la viuda, pero tiene de la mano a Josesito. Dice a la mujer: "Nadie vendrá antes de que regrese, a no ser que sea un gentil. Pero cualquiera que venga, entretenlo hasta el día siguiente, diciéndole que sin falta regresaré."

"Así lo diré, Maestro. Y si fuesen enfermos los hospedaré como me enseñaste."

"Entonces hasta pronto. La paz sea con vosotros. Ven Mannaén."

Por estas breves palabras comprendo que los enfermos e infelices en general lo siguieron hasta Corozaim, y que a la evangelización con el trabajo, siguió la del milagro. Si Corozaim permanece siempre indiferente, señal es que es un terreno agreste e incultivable. Pero Jesús pasa a través de la región, saludando a los que le saludan, como si nada pasase, y luego continúa hablando con Mannaén que no sabe si regresar a Maqueronte o permanecer todavía una semana...

... En la casa de Cafarnaum se preparan entre tanto para el sábado. Mateo, que cojea todavía, recibe a los compañeros, les brinda agua y frutas frescas, y les pregunta sobre las misiones.

Pedro arruga las narices a ver que ya hay fariseos vagabundeando cerca de la casa: "Tienen ganas de amargarnos el sábado. Casi estoy dispuesto a ir al encuentro del Maestro y decirle que se vaya a Betsaida, para que estos se queden con un palmo de narices."

"¿Y crees que el Maestro lo haría?" le pregunta su hermano.

"Además está en la habitación de abajo el pobre infeliz que lo espera." observa Mateo.

"Se podría llevarlo en la barca a Betsaida, y yo, o cualquier otro ir al encuentro del Maestro" insiste Pedro.

"Casi, casi..." dice Felipe que como tiene su familia en Betsaida, gustoso iría.

"¡Tanto más que estáis viendo hoy la guardia se ha reforzado con escribas! Vamos sin perder tiempo. Vosotros con el enfermo, pasáis por el huerto, y salís detrás de la casa. Yo llevo la barca hasta el "pozo de la higuera" y Santiago hará lo mismo. Simón Zelote y los hermanos de Jesús irán al encuentro del Maestro."

"Yo no voy con el endemoniado" grita Iscariote.

"¿Por qué? ¿Tienes miedo de que se te pegue el demonio?"

"No me hagas enojar, Simón de Jonás. Dije que no voy y no voy."

"Ve con los primos al encuentro de Jesús."

"No."

"¡Uf! Ven en la barca."

"No."

"En resumidas cuentas ¿qué quieres? Eres siempre el de los obstáculos..."

"Quiero estarme donde estoy, aquí. No temo a nadie y no me escapo. Por otra parte el Maestro no estaría contento de ello. Sería causa de otro sermón de reproche, y no me lo quiero merecer por vuestra culpa. Id vosotros. Yo me quedaré a informar..."

"¡Así no! Todos o nadie" grita Pedro.

 

LLEGA JESÚS Y CURA A UN ENDEMONIADO

 

"Entonces nadie, porque el Maestro está ya aquí. Vedlo que se acerca" dice serio Zelote que estaba mirando hacia el camino.

Pedro, disgustado, rezonga entre la barba. Va a encontrar a Jesús con los demás. Después de los primeros saludos le hablan del endemoniado, ciego y mudo, que con sus familiares le espera desde hace mucho tiempo.

Mateo explica: "Está como inerte. Se echó sobre sacos vacíos y de allí no se ha movido. Los familiares tienen confianza en Ti. Ven a tomar algo y luego lo curarás."

"No. Voy al punto donde está él. ¿En dónde?"

"En la habitación de abajo. Cerca del horno. Allí lo puse con sus familiares porque hay muchos fariseos, y también escribas, que parecen estar al acecho."

"Es cierto y sería mejor no darles gusto" refunfuña Pedro.

"¿No está Judas de Simón?" pregunta Jesús.

"Se quedó en casa. Siempre debe hacer lo que otros no hacen" rezonga una vez más.

Jesús mira pero no reprende. Se apresura a ir a la casa, confiando el niño a Pedro, que lo acaricia sacando al punto de la cintura un silbato diciendo: "Uno para ti y otro para mi hijo. Mañana por la tarde te llevo a verlo. Me los hizo un pastor a quien hablé de Jesús."

Jesús entra en casa, saluda a Judas que parece muy ocupado en arreglar los trastos, y que saca hasta una especie de dispensa pequeña de color oscuro que estaba apoyada contra el horno.

"Sacad al enfermo" dice Jesús.

Un fariseo que no es de Cafarnaum y que tiene una cara tan fea peor aún que la de los fariseos locales replica: "No es un enfermo. Es un endemoniado."

"Es siempre una enfermedad del espíritu..."

"Le ha impedido el ver y el hablar..."

"La posesión es siempre una enfermedad del espíritu que se extiende a los miembros y los órganos. Si me hubieses dejado terminar, hubieras sabido que me refería a esto. También la fiebre está en la sangre cuando uno se enferma, y luego por la sangre ataca a esta o a aquella parte del cuerpo."

El fariseo no puede replicar más y se calla.

Llevan al endemoniado ante Jesús. Inerte. Dijo bien Mateo. El demonio lo tiene aniquilado: se agolpa gente. Es sorprendente cómo sobre todo en las horas de recreo, lograse la gente, que antes apenas se veía alguna, agolparse tan pronto. Están también los notables de Cafarnaum, entre los que figuran los cuatro fariseos, Jairo y en un ángulo con la excusa de guardar el orden, el centurión romano y con él otros ciudadanos.

"¡En nombre de Dios deja las pupilas y la lengua de este! Lo quiero. Sal de esta creatura. No te es más lícito tenerla. ¡Largo!" ordena Jesús haciendo el ademán de imperio.

El milagro se desenvuelve con un grito de rabia del demonio y termina con uno de alegría del libertado que exclama: "¡Hijo de David, Hijo de David! ¡Santo Rey!"

 

ACUSAN A JESÚS QUE ESTA CURACIÓN HA SIDO PREPARADA 

PARA ENGAÑAR

 

"¿Cómo supo que fue Él quien lo curó?" pregunta un escriba.

"¡Si es toda una comedia! ¡Esta gente ha sido pagada para representarla!" dice un fariseo alzando los hombros.

"¿Quién le pagó? ¿Se puede saber?" pegunta Jairo.

"Tú también."

"¿Con qué fin?"

"Para hacer célebre a Cafarnaum."

"No envilezcas tu inteligencia escupiendo estupideces y tu lengua ensuciándola con mentiras. Sabes que no es verdad, y deberías comprender que estás repitiendo una sandez. Lo que ha sucedido aquí, ha sucedido en muchas parte de Israel. ¿Habrás, pues, siempre quien pague? ¡ En verdad no sabía que en Israel la plebe fuese muy rica! Porque vosotros, y con vosotros todos los grandes, ciertamente que no pagáis. Luego paga la plebe, la única que ama al Maestro."

"Tú eres sinagogo y lo amas. Allí está Mannaén. En Betania está Lázaro hijo de Teófilo. Ellos no pertenecen a la plebe."

"Pero ellos y yo somos honestos. No engañamos a nadie en nada, y mucho menos en asuntos de creencia. No nos lo permitimos, pues tememos a Dios, y hemos comprendido lo que a Él agrada: la honestidad."

Los fariseos voltean las espaldas a Jairo y atacan a los familiares del curado: "¿Quién os dijo que vinieseis aquí?"

"¿Quién ? Muchos. Curados o familiares de los curados."

"¿Qué os dieron?"

 "¿Darnos ? La seguridad de que Él lo habría curado."

"¿Pero de veras estaba enfermo?"

"¡Oh cabezas fraudulentas! ¿Pensáis que todo esto haya sido una pantomima? Id a Gadara a preguntar, si no nos creéis, de la desgracia de la familia de Anna de Ismael."

La gente de Cafarnaum, desdeñosa, se alborota por una parte por otra galileos venidos de cerca de Nazaret, dicen: "¡Y con todo este es hijo de José el carpintero!"

Los ciudadanos de Cafarnaum, fieles a Jesús, gritan: "No. Es lo que Él dice ser, y lo que el curado ha dicho: "Hijo de Dios e Hijo de David". "

"Pero no aumentéis el fanatismo del pueblo con vuestras afirmaciones" dice desdeñoso un escriba.

"¿Y qué es entonces, según vosotros?"

"¡Un Belcebú!"

"¡Je, je! Lenguas de víboras. ¡Blasfemos! ¡Endemoniados! ¡Ciegos de corazón! ¡Ruina nuestra! ¿Querríais quitarnos la alegría del Mesías? ¿Eh? ¡Usureros! ¡Piedras secas!" Continúa la batahola. ¡Qué batahola!

Jesús que se había ido a la cocina a beber un poco de agua, se asoma al umbral a tiempo de oír una vez más la acostumbrada y necia acusación farisea: "Este no es sino un Belcebú, porque los demonios lo obedecen. El gran Belcebú, su padre, lo ayuda y Él arroja los demonios no con otra cosa que con el auxilio que le presta Belcebú príncipe de los demonios."

 

ANTE LA ACUSACIÓN QUE DIRIGEN A JESÚS LOS FARISEOS 

LES REPLICA:

 

UN REINO DIVIDIDO EN PARTIDOS CONTRARIOS SE DEBILITA

 

LA CONCORDIA ADEMÁS DE SER ASTUCIA MANTIENE LIBRES, 

FUERTES Y SOLÍCITOS LOS MIEMBROS. ESTO DEBERÍAN 

REFLEXIONAR LOS PATRIOTAS, LOS CIUDADANOS, LOS 

FAMILIARES

 

Jesús baja los dos escalones del umbral y se acerca, derecho, severo pero tranquilo. Se detiene enfrente del grupo de escribas y fariseos, los mira agudamente. Les dice: "Aun en la tierra vemos que un reino dividido en partidos contrarios se debilita internamente y se convierte en fácil presa para que lo ataquen y desbasten naciones circunvecinas, que lo harán su esclavo. Vemos en la tierra también que una ciudad dividida en partidos contrarios no tiene bienestar. Lo mismo sucede en una familia cuyos miembros se dividen por mutuo rencor. Se resquebraja, se convierte en trizas que no sirven a nadie y son el hazmerreír de los conciudadanos... La concordia además de deber es astucia, porque mantiene libres, fuertes y solícitos los miembros. Esto deberían reflexionar los patriotas, los ciudadanos, los familiares cuando por el capricho de un bien particular, sienten la tentación de separación y engaño que son siempre peligrosos en los partidos, destructores en los afectos.

Tal astucia de hecho la ponen en práctica los que son dueños del mundo. Observad a Roma en su innegable potencia, que nos es molesta. Domina el mundo. Está unida en un solo parecer, en una sola voluntad: "dominar". También entre ellos habrá ideas contrarias, antipatías, rebeliones pero corren en el fondo: en la superficie hay un solo bloque, sin hendiduras, sin confusiones. Todos quieren la misma meta y corren peligros porque la desean, y siempre lo logrará, mientras deseen lo mismo.

 

EL REINO DE LAS TINIEBLAS

 

Ved este ejemplo humano de astucia unida y pensad: si estos hijos del siglo son así, ¿qué no será Satanás? Para nosotros ellos son un Satanás, pero su satanismo pagano no es nada respecto al perfecto de Satanás y de sus demonios. Allí, en aquel reino eterno, que no tiene siglos, fin, límites de astucia y perversidad, allí donde el gozo consiste en dañar a Dios y a los hombres y su respirar es hacer mal, doloroso placer para ellos, el único, atroz; con una perfección maldita esos espíritus se han llegado a fundir en un solo querer: "hacer daño"...

Ahora bien, si como queréis afirmar, para que se dude de mi poder, Satanás es el que me ayuda porque Yo soy un Belzebú menor ¿no sucede entonces que Satanás está en desacuerdo consigo mismo y con sus demonios, si arroja a estos de sus posesiones? Y si está en desacuerdo ¿su reino podrá acaso durar? Ciertamente que no. Satanás es astutísimo y no se hace daño. El trata de extender, no de reducir su reino en los corazones. Su vida es "robar-dañar-mentir, ofender-meter confusión". Robar almas a Dios y paz a los hombres. Dañar a las creaturas del Padre causándole dolor. Mentir para extraviar. Ofender para gozar. Sembrar confusión porque él es desorden. Y no puede cambiar. Es eterno en su ser y en sus métodos.

Respondedme a esta pregunta: si Yo arrojo a los demonios en nombre de Belzebú ¿en nombre de quien lo arrojan vuestros hijos? ¿Queréis confesar entonces que también ellos son Belzebú? Ahora bien, si lo afirmáis, ellos os tendrán por calumniadores. Si su santidad es tal que no reaccione contra vuestra acusación, os juzgaréis a vosotros mismos, confesando que creéis tener muchos demonios en Israel, y os juzgará Dios en nombre de los hijos de Israel a quienes acusáis de ser demonios. Por lo cual, de donde quiera que venga la sentencia, serán ellos en el fondo vuestros jueces, exactamente donde la presión humana no puede sobornar el juicio.

Si como es verdad, Yo arrojo los demonios por el Espíritu de Dios, prueba clara es que ha llegado a vosotros el reino de Dios y el rey de este reino, que tiene tal poder que ninguna fuerza contraria a su reino le puede resistir. De donde se deduce que Yo ato y obligo a los usurpadores de los hijos de mi reino a salir de los lugares ocupados y a restituirme la presa para que tome posesión de ella. ¿No se comporta acaso así uno que tenga ganas de entrar en una casa en que vive un hombre fuerte para arrebatarle los bienes, bien o mal adquiridos? Así se comporta. Entra y lo ata, y después de haberlo hecho, puede saquear la casa. Yo ato al ángel tenebroso que se ha usurpado lo mío y le quito los bienes que me robó. Sólo puedo hacerlo Yo porque soy el Fuerte, el Padre del siglo futuro, el Príncipe de la paz."

 

QUÉ QUIERES DECIR CON "PADRE DEL SIGLO FUTURO"

 

"Explícanos qué quieres decir con: "Padre del siglo futuro". ¿Crees que vas a vivir hasta el nuevo siglo: y mucho más tontamente, piensas crear el tiempo, Tú, pobre hombre? El tiempo es de Dios" pregunta un escriba.

"¿Y tú escriba, me lo preguntas? ¿No sabes ni siquiera que vendrá un siglo que tendrá principio pero no fin, y que será el mío? En él triunfaré reuniendo a mi alrededor a los que son hijos de él, y vivirán eternos como el siglo que habré creado, y ya lo estoy haciendo al poner el espíritu en su valor sobre la carne y sobre el mundo, y sobre los espíritus infernales que arrojo porque todo lo puedo.

 

QUIEN NO ESTÁ CONMIGO ESTÁ CONTRA MÍ Y QUIEN NO 

RECOGE, DESPERDICIA... Y QUIEN NO CREE ESTO ...PECA 

CONTRA EL ESPÍRITU SANTO CUYA PALABRA LA DIJERON LOS 

PROFETAS, Y NO ES MENTIRA NI ERROR, Y DEBE CREERSE SIN 

PRETEXTO ALGUNO.

 

Por esto os digo que quien no está conmigo, está contra Mí y que quien no recoge, desperdicia. Porque Yo soy el que soy. Y quien no cree esto, que está ya profetizado, peca contra el Espíritu Santo cuya palabra la dijeron los profetas, y no es mentira ni error, y debe creerse sin pretexto alguno.

Yo os lo digo: todo será perdonado a los hombres, su pecado y blasfemia, pues Dios sabe que el hombre no es sólo espíritu sino carne, y carne que sufre tentaciones y que sucumbe a debilidades imprevistas. Pero la blasfemia contra el Espíritu no será perdonada. Quien hablase contra el Hijo del Hombre será aun perdonado porque la carne que envuelve mi Persona y arrolla al hombre que habla contra de Mí, puede arrastrarlo al error. Pero quien hablara contra el Espíritu Santo no será perdonado ni en esta ni en la vida futura, porque la Verdad es la que es: clara, santa, innegable y manifestada al espíritu de modo que no induzca al error. Cosa diversa sucede a los que voluntariamente quieren el error, que yerran. Negar la verdad que dijo el Espíritu Santo es negar la Palabra de Dios y al Amor que aquella palabra manifestó por amor de los hombres. Y el pecado contra el Amor no es perdonado.

Pero cada uno da frutos de su planta. Vosotros dais los vuestros, y no son frutos buenos. Si regaláis un árbol bueno para que se ponga en la huerta, ciertamente dará buenos frutos; pero si dais un árbol nocivo, nocivo será el fruto que se recogerá, y todos dirán: "Este árbol no es bueno". Porque por el fruto se conoce el árbol.

Y vosotros ¿cómo podéis imaginar que habléis bien, vosotros que sois malos? Pues la boca habla de lo que está lleno el corazón. De la sobreabundancia que hay en nosotros, de ella sacamos nuestras acciones y razonamientos. El hombre bueno saca de su buen tesoro cosas buenas; el perverso de su mal tesoro, cosas malas. Y habla y obra según lo que tiene dentro.

 

SI AUN EL CALLAR ES OCIOSIDAD HACED MÁS BIEN ESTO 

QUE PECAR CON LA LENGUA

 

"MAESTRO, SE CREE MEJOR EN LO QUE SE VE. DANOS, PUES, 

UNA SEÑAL PARA QUE PODAMOS CREER QUE ERES LO QUE 

DICES SER."

 

En verdad os digo que la ociosidad es culpa, pero es mejor estar de ociosos que cometer acciones perversas. Y os digo también que es mejor callar que hablar sin ningún fin y con malicia. Si aun el callar es ociosidad, haced más bien esto que pecar con la lengua. Os aseguro que de las palabras que se dicen por ociosidad a los hombres se pedirá justificación en el día del juicio, y que por las palabras dichas los hombres serán justificados o condenados. Estad, pues, atentos, vosotros que proferís palabras más que ociosas, porque no sólo son ociosas sino que obran el mal, y con intención de alejar los corazones de la Verdad que os está hablando."

Los fariseos se consultan con los escribas, y luego todos juntos, fingiendo cortesías, preguntan: "Maestro, se cree mejor en lo que se ve. Danos, pues, una señal para que podamos creer que eres lo que dices ser."

"¿Veis que en vosotros existe el pecado contra el Espíritu Santo que muchas veces me ha señalado por el Verbo encarnado? Verbo y Salvador, que llegó al tiempo señalado, precedido y seguido por señales que dieron los profetas, y que obra lo que dice el Espíritu."

Responden: "Creemos en el Espíritu, pero ¿cómo podemos creer en Ti si no vemos una señal con nuestros ojos?"

"¿Cómo podéis, entonces, creer en el Espíritu cuyas acciones son espirituales, si no creéis en las mías que pueden percibirse con los ojos? Mi vida está llena de ellas. ¿No bastan todavía? No. Yo mismo os respondo que no. No bastan todavía. A esta generación adúltera y perversa que busca una señal se le dará una sola: la del profeta Jonás. De hecho, como Jonás estuvo tres días en el vientre de una ballena, así el Hijo del hombre estará tres días en las entrañas de la tierra. En verdad os digo que los Ninivitas resucitarán en el día del juicio como todos los hombres y serán enemigos de esta generación y la condenarán, porque ellos hicieron penitencia con la predicación de Jonás y vosotros no la hacéis. Y aquí está Uno que es más que Jonás. Y resucitará y será enemiga vuestra la reina del Mediodía y os condenará porque ella vino desde los últimos confines de la tierra para oír la sabiduría de Salomón. Y aquí esta Uno que es más que Salomón."

 

"¿POR QUÉ DICES QUE ESTA GENERACIÓN ES ADÚLTERA 

Y PERVERSA?

 

... SOIS ADÚLTEROS, HABÉIS RECHAZADO EL MATRIMONIO 

SOBRENATURAL CON LA LEY DIVINA Y OS HABÉIS CASADO, EN 

UNA SEGUNDA UNIÓN ADÚLTERA, ...

 

"¿Por qué dices que esta generación es adúltera y perversa? No será más que las otras. En ella hay los mismos santos que hubo en las otras. No ha sido cambiada la concatenación en Israel. Nos ofendes."

"Vosotros sois los que os ofendéis haciéndoos daño en vuestras almas al alejarlas de la verdad, y con ello de la salvación. Os respondo lo mismo. Esta generación no es santa sino en las vestiduras y en lo externo. Por dentro no lo es. Hay en Israel los mismos nombres para señalar las mismas cosas, pero no les corresponde la realidad. Hay los mismos usos, vestidos, ritos, pero les falta el espíritu. Sois adúlteros, habéis rechazado el matrimonio sobrenatural con la ley divina y os habéis casado, en una segunda unión adúltera, con la ley de Satanás. No estáis circuncidados sino en un miembro caduco. El corazón no lo está. Sois perversos porque os habéis vendido al maligno. He terminado."

"Nos ofendes demasiado. Pero si es así, ¿por qué no libraste a Israel del demonio, para que se haga santo?"

"¿Tiene Israel esta voluntad? No. La tienen esos pobres que vienen para ser libertados del demonio porque lo sienten como un peso y una vergüenza. Vosotros no lo sentís. E inútilmente seríais libertados, porque no teniendo voluntad de serlo seríais nuevamente presa y de una manera más fuerte. Porque cuando sale un espíritu inmundo, vaga por lugares áridos en busca de reposo y no lo encuentra. Tened en cuenta, que no se trata de lugares materiales. Son áridos porque le son hostiles al no acogerlo, así como la tierra árida es hostil a la semilla. Entonces dice: "Regresaré a mi casa de donde fui arrojado por la fuerza y contra su voluntad. Estoy seguro que me acogerá y me dejará descansar". Regresa , pues, a lo que había sido suyo, y lo encuentra muchas veces dispuesto a acogerlo porque en verdad os digo que el hombre tiene más nostalgia de Satanás que de Dios, y si Satanás no le molesta algún miembro, no se lamenta de ninguna otra posesión. Va, pues y encuentra la casa vacía, barrida, adornada, olorosa a limpieza. Entonces se va a tomar otros siete espíritus peores porque no quiere perderla más, y con estos siete espíritus peores que él entra en la casa y todos se establecen en ella. Y esta segunda situación de uno que se convirtió una vez y se pervierte otra, es peor que la primera. Porque el demonio conoce la medida en la que ese hombre ama a Satanás y es ingrato con Dios, y también porque Dios no regresa donde se desprecian sus gracias. Expertos de una posesión los brazos se abren a una mayor. La recaída en el satanismo es peor que una recaída en tisis mortal, de la que alguien se había curado antes. No se mejorará ni se curará jamás. Igual cosa acaecerá también a esta generación que convirtió el Bautista, y que ha vuelto a ser pecadora porque ama al malvado y no a Mí."

Un alboroto que no es ni de aprobación ni de protesta cunde entre la multitud que se oprime por ser mucha, de manera que hasta la calle, el huerto y la terraza están llenos de gente. Hay quienes están sentados a horcajadas sobre la pared, que se levanta en el borde del huerto y sobresale sobre las plantas de los huertos cercanos porque todos quieren oír la disputa entre Jesús y sus enemigos. Un ruido confuso, como una onda que del lago llega a la playa, cunde de boca en boca hasta los apóstoles que están más cercanos a Jesús, esto es, Pedro, Juan, Zelote y los hijos de Alfeo, porque los demás unos están en la terraza, y otros en la cocina. menos Judas Iscariote que está en la calle, entre la gente.

 

LLEGA SU MADRE CON SUS PRIMOS MUY ENOJADOS 

A VER A JESÚS

 

¿QUIÉN ES MI MADRE? ¿QUIENES SON MIS HERMANOS? ... 

LOS QUE HACEN LA VOLUNTAD DE DIOS SON 

MIS HERMANOS Y HERMANAS, SON MI MADRE. 

NO TENGO OTROS. ...

 

Pedro, Juan, Zelote, los hijos de Alfeo recogen este sordo rumor y dicen a Jesús: "Maestro, están tu Mamá y tus hermanos. Da orden de que se aleje la multitud para que puedan acercarse a Ti, porque ciertamente habrá una gran razón que los obligó a venir a buscarte."

Jesús levanta su cabeza y ve en el fondo de la multitud el rostro angustiado de su Madre que lucha por no llorar, entre tanto que José de Alfeo le habla excitadamente. Ve los gestos que una y otra vez hace de no admitir, enérgicos no obstante la insistencia de José. Ve también la cara embarazada de Simón, claramente afligida, disgustada... Pero no sonríe y no da ninguna orden. Deja a la Afligida en su dolor y a sus primos donde están.

Baja los ojos a la multitud, y respondiendo a los apóstoles que le están cerca, responde también a los que están lejos y que tratan de hacer valer la sangre sobre el deber. "¿Quién es mi Madre? ¿Quiénes son mis hermanos?"

Gira los ojos. Hay severidad en el rostro que palidece por esta violencia que se debe hacer a fin de colocar el deber sobre el afecto y la sangre y lograr negar su unión con su Madre y para servir al Padre. Dice, señalando con un largo ademán a la multitud que se aprieta a su alrededor a la luz roja de las antorchas y la luz plateada de la luna casi llena: "He aquí a mi madre, y he aquí a mis hermanos. los que hacen la voluntad de Dios son mis hermanos y hermanas, son mi madre. No tengo otros. Los míos serán esto si cumplen la voluntad divina y con mayor perfección que cualquier otro en hacer la voluntad de Dios hasta el sacrificio total de cualquier otro querer o voz de sangre y de afecto."

La multitud ruge como si fuese un mar rasgado por subitáneo viento.

Los escribas son los primeros en huir diciendo: "¡Es un demonio. Reniega hasta de su sangre!"

Los parientes se adelantan diciendo: "¡Es un loco! ¡Tortura hasta a su Madre!"

Los apóstoles dicen: "En verdad que en esta palabra se concentra todo el heroísmo."

La multitud dice: "¡Cómo nos ama!"

A duras penas María con José y Simón se abren paso entre la multitud. María toda dulzura, José todo rabia, Simón todo embarazo. Llegan a donde está Jesús.

José al punto lo ataca: "Eres un loco. Ofendes a todos. No respetas ni siquiera a tu Madre. Pero ahora estoy aquí y te lo impediré. ¿Es verdad que vas de aquí a allá como trabajador? Si es verdad ¿por qué no trabajas en tu carpintería, para alimentar a tu Madre? ¿Por qué mientes diciendo que tu trabajo es la predicación, ocioso e ingrato que eres, si luego vas a buscar en casa ajena un trabajo remunerado? ¡Responde!"

Jesús se vuelve, toma la mano al niño José, se lo tiene cerca y luego lo levanta teniéndolo por las axilas. Dice: "Mi trabajo fue para dar de comer a este inocente y a sus parientes, y persuadirles de que Dios es bueno. Se predicó a Corozaim la humildad y la caridad, y no sólo a Corozaim, sino también a ti, José, hermano injusto. Te perdono porque sé que la sierpe te mordió. Te perdono también a ti, Simón inconstante. No tengo nada que perdonar a mi Madre, ni ella tiene nada que me perdone, porque juzga con justicia. Que haga el mundo lo que quiera. Yo hago lo que Dios quiere. Y con la bendición del Padre y de mi Madre soy feliz más que si todo el mundo me aclamase como rey suyo. Ven,  Madre. No llores. Ellos no saben lo que hacen. Perdónalos. "

"¡Oh, Hijo mío! Yo sé. Tú sabes. No hay nada que decir..."

"No hay otra cosa que decir a la gente más que: " Idos en paz". "

Jesús bendice la multitud, y luego, teniendo a María con la mano derecha, con la izquierda al niño, se dirige a la escalera y es el primero en subir.

V. 834-845

A. M. D. G.