Las Apariciones de la Santísima Virgen María en San Sebastián de Garabandal
Capítulo 145
Nuestro Señor Jesucristo
se aparece
al P. Lucio Rodrigo S.J. poco antes de morir.
Le confirma que los hechos de Garabandal son verdaderos. Era lo que tanto deseaba saber con total seguridad.
P. Lucio Rodrigo S.J.
El P. Lucio Rodrigo S.J., catedrático de la Universidad Pontificia de Comillas, teólogo de prestigio, se dio cuenta enseguida del significado netamente escatológico de las palabras de la Virgen:
-- Después de Juan XXIII, ya solo quedan tres Papas.
Es decir estamos en el trascendental paso al "Fin de los tiempos".
Los acontecimientos profetizados, en especial el Aviso y el Milagro, son de tal magnitud que por ello escribió:
"Después de los misterios de nuestra Redención, no ha habido en la Historia de la Iglesia ningún suceso de naturaleza religiosa, espiritual, relacionado con la historia de la Salvación, tan importante como Garabandal. En Garabandal, la Virgen profetiza los últimos tiempos."
El P. Rodrigo vio el Milagro de la Forma, profecía que se cumplió tal como Conchita lo anunció, y desde que tuvo en Garabandal ésta y otras pruebas, creyó en las apariciones con toda firmeza. Procuró en todo momento propagar los mensajes que la Santísima Virgen había dado a las videntes.
Aunque estaba convencido, le pedía a Nuestra Señora una evidencia totalmente clara, para él sólo, de que las Apariciones eran verdad. Durante un viaje en automóvil desde la capital de España hacia Santander, tuvo un accidente del que quedó en estado grave, al punto de que las heridas le causaron la muerte.
Dios escuchó sus deseos y poco antes de su fallecimiento tuvo una aparición de Nuestro Señor, resplandeciente de Gloria:
«Nuestro Señor le confirmó que lo que presenció en Garabandal era verdad; que su Santísima Madre se había aparecido allí»
El P. Rodrigo lo dijo después a otros antes de subir al Cielo. Dios permitió que muchos se enterasen de esta forma de la autenticidad de los sucesos de Garabandal pues creían plenamente que el P. Rodrigo les estaba diciendo la verdad, ahora con una firmeza absoluta.
El Padre Rodrigo falleció el 30 de marzo de 1973.
El doctor Ortiz escribe sobre sus últimos días al Padre Pesquera:
Fuimos a ver al Padre Rodrigo el 18 de Marzo y le encontré sumamente agotado. Nos dijo con toda lucidez que estaba acabando, y que se despedía hasta el Cielo. Intentó darnos la bendición y no pudo terminar.
Al marcharnos hablé con el hermano enfermero y me dijo que había estado a visitarle el Sr. Obispo.
El 31 del mismo mes, ya fallecido y en su funeral en Comillas, coincidimos con Jaime G. Llorente; me comunicó que había ido a ver al Padre pocos días antes de morir y este le reveló que el Señor le había concedido la gracia de confirmarle
«la autenticidad de las Apariciones de Garabandal en las que él siempre había creído».
El afecto y exquisita delicadeza con la que el P. Rodrigo trataba todo lo referente a las Apariciones se ve en sus cartas y escritos.
El 27 de Enero de 1966 dice entre otras cosas a la Sra. Herrero:
Lo íntimo de la entrevista de Conchita con el Cardenal Ottaviani y con el Papa, independiente la una de la otra, se mantiene del todo secreto; pero lo que se puede decir es que Conchita estuvo mucho tiempo con el Cardenal, a quien acompañaban otros señores, sin duda del Santo Oficio: quedaron sumamente impresionados.
Luego vino la visita al Papa Pablo VI, quien estuvo cariñosísimo con Conchita y hay detalles que no me atrevo a contar por prudencia, que demuestran que el Papa ya había tomado el asunto de Garabandal por suyo, pero ahora más.
Demos gracias al Señor por la cosa en sí, y hasta por la parte que nos toca ¿No le parece? ¿Pudimos soñar alguna vez con esta predilección del Señor y de Nuestra Madre Celestial con nosotros...? Es para llorar de profundísima alegría.
Ante el inesperado giro de los acontecimientos en los que Conchita tuvo una locución de Nuestro Señor en el que la dijo que "no la había llamado a ser monja" y que la quería en el mundo "ofreciendo todas la cruces que por Mí hallarás" y para que "hablase al mundo de María", comenta el P. Rodrigo
en una carta de Junio de 1966:Para mí ha sido también una profunda sorpresa: en nuestro humano modo de pensar, siempre de vista muy corta, lo natural era creer que todo terminaría forzosamente en vocación religiosa; pero se ve que los planes del Señor con Conchita son de una envergadura soberana: sufrir entre los hombres, en este mundo corrompido, en medio de él, para salvar muchas almas.
Se insinúa una misión importantísima, que a mí me hace comprender más que estamos comenzando a vivir la última llamada del Señor, para poder detener su justicia.
Reflexionando es para caer en la cuenta de lo ocurrido, en contra de los que suponíamos habría de ser la vocación de Conchita. Tres veces que yo sepa o recuerde, ella ha preguntado al Señor y a la Santísima Virgen sobre su vocación hacia el convento; y siendo así que a otras preguntas que hacía le contestaban, a esta nunca tuvo respuesta: aparición del día de la Inmaculada del año 1962, Locución del 10 de junio de 1963 y Aparición del 13 de Noviembre último.
Al Padre Lucio Rodrigo S.J. debemos la importante afirmación de que el Papa visitará Garabandal; él anotó lo que la Santísima Virgen había dicho a Conchita.
De una entrevista al Padre Alfredo Combe:
¿Es verdad que usted vio en uno de los cuadernos del Padre Rodrigo Llanos, S.J., uno de los confesores de Conchita durante el tiempo de las apariciones, donde Conchita decía que el Santo Padre visitaría Garabandal?.
P. Combe: Estoy dispuesto a jurarlo sobre el Evangelio.
Sucedió unos pocos meses antes de la muerte del Padre Rodrigo, el 30 de marzo de 1973, cuando fui a hacerle una visita. Mientras hablábamos, se levantó súbitamente, fue a su escritorio y cogió un cuaderno de anotaciones eclesiásticas.
Empezó a ojearlo buscando una página en particular, la encontró y me la mostró. Aunque no conozco el español muy bien, leí lo que estaba escrito en la página izquierda y luego lo traduje.
Esto es lo que decía:
-- La Virgen ha dicho a Conchita: primero, que el Santo Padre iría a Tierra Santa.
Y el Padre Rodrigo escribió debajo de esto,
-- Cumplido.
Luego, decía que:
-- El Santo Padre iría a Fátima.
Y el Padre Rodrigo escribió debajo,
-- Cumplido.
Y tercero:
-- El Santo Padre irá a Garabandal.
Y el Padre Rodrigo escribió:
-- Estamos esperando.
Así pues, el Papa Juan Pablo II, por ser el tercero en la profecía de los tres Papas, será el que verá el Milagro desde donde esté y el que, a su hora visitará Garabandal.
A. M. D. G.