Las Apariciones de la Santísima Virgen María en San Sebastián de Garabandal

Capítulo 257

 

P. Francisco A. Benac S.J.

Mi encuentro con el Obispo de Santander.

 

P. Francisco A. Benac S.J., misionero jesuita en India.

 

 

P. Francisco A. Benac S.J.

Mi encuentro con el Obispo de Santander. Año 1979.

Algunos de vosotros os habréis dado perfecta cuenta que frecuentemente en nuestros semanarios católicos de la India y del extranjero, aparecen artículos contradictorios referentes a la actitud de la iglesia hacia las apariciones de la Santísima Virgen en Garabandal.

En esta editorial, pues, os presento un sumario bastante enriquecedor sobre esta materia.

Recientemente fui recibido en dos ocasiones por el Obispo de la diócesis de Santander D. Juan Antonio del Val que es la autoridad responsable de la Iglesia sobre materias pertenecientes a las apariciones en Garabandal.

Mi primer encuentro con Don Juan Antonio tuvo lugar el 4 de septiembre del año 1978; duró noventa minutos. En el transcurso del mismo le presenté el mensaje oficial dirigido a él por los delegados del Congreso Mundial Mariano de Garabandal, en Lourdes en agosto del año pasado. El Obispo del Val me pidió que diera las gracias a los delegados.

En referencia a la petición hecha a Su Eminencia por los delegados del Congreso de que él deba invitar sin demora a todos los testigos vivientes de las apariciones para que le dieran sus testimonios para archivarlos, Su Eminencia contestó que "Esta tarea ya había sido confiada al Párroco de Puentenansa y Garabandal, Don Juan González". Tal paso no se había dado nunca anteriormente.

Este importante encuentro con Don Juan Antonio, en una atmósfera íntima y amistosa, de mutua confianza, fue para mi una fuente de información, de inspiración y de ánimo muy valioso.

Otra vez recientemente, el día 7 de febrero de este año (1979), su Eminencia me dio la bienvenida en un segundo encuentro. Este duró ochenta minutos. El mismo tuvo lugar en el Seminario Mayor Diocesano donde su Eminencia tenía consultas con los diáconos de la Diócesis. Fui recibido en las escaleras por el Vicario General que me condujo a la oficina del Obispo; el Obispo del Val apreció la información que le presenté después de mi encuentro con tan importantes expertos, teólogos y escritores sobre Garabandal como los Padres: Joseph Pelletier A.A., USA; François Turner O.P., Francia; A. Combe, Francia; Canónigo Julio Porro, Catedral de Tarragona (España); Valentín Marichalar, Párroco de Cosío y principal testigo de las apariciones; Juan González, actualmente a cargo de la parroquia de Garabandal; el abogado Francisco Sánchez Ventura, autor del libro más popular sobre Garabandal, hoy en su decimonovena edición; además y muy importante, mi encuentro con tres de las videntes de las apariciones y con el Padre Ramón María Andreu, S.J., testigo de muchas de las apariciones en Garabandal.

El Obispo don Juan Antonio del Val considera que ha sido asombroso cómo, los Mensajes de Garabandal, han llegado a los cuatro puntos del mundo, como es evidente por el Congreso Mariano Mundial de Garabandal, en el que estuvieron presentes 200 delegados de 26 países de todos los cinco continentes.

Además de mis encuentros con el Obispo de Santander, la Providencia me dio dos oportunidades más que considero de gran valor para cualquier futura investigación oficial de la Iglesia sobre Garabandal. El Dr. Luis Morales, de Santander, un conocido psiquiatra, había dirigido las investigaciones sobre Garabandal en 1961. En una conversación personal con el psiquiatra de Barcelona, el Dr. Ricardo Puncernau, yo supe que el Doctor Morales le había dicho que él estaba interesado en Garabandal y que había cambiado su opinión respecto a las apariciones.

El día antes de mi primer encuentro con el Obispo del Val, le pedí al Doctor Luis Morales una entrevista que me fue concedida. Los lectores estarán interesados en saber como el Dr. Luis Morales ha cambiado tan drásticamente en el transcurso de los años.

1961. El Dr. Luis Morales fue oficialmente elegido con otros pocos para investigar las apariciones de Garabandal. La comisión actuó muy a la ligera, apenas viendo a las cuatro videntes más de unas pocas veces. El Dr. Morales, en un testimonio personal de 136 palabras, declaró que "todo el asunto de Garabandal era nada más que una serie de fenómenos vulgares e histéricos".

3 de septiembre de 1978. Mi primera visita al Dr. Morales fue grabada en su totalidad con su consentimiento; ésta tuvo una duración de dos horas. En el transcurso de la misma y no sin alguna reserva ante mi insistencia sobre su cambio de actitud hacia Garabandal, hizo el siguiente comentario: "Ahora veo la realidad existencial de Nuestra Señora en Garabandal. Considero a Garabandal como a Fátima, un don de la Providencia para la humanidad...", "...Garabandal es en verdad un regalo de Cristo a nosotros a través de la Madre...". Al final de la conversación el Dr. Morales, contestando a mi última pregunta, exclamó: "¡Ah, sí, Garabandal ha sido una manifestación de la Divina Gracia... !".

Un escrito de esta conversación fue presentado al Obispo del Val. Su reacción fue una mezcla de sorpresa y satisfacción de este grandísimo cambio en el Dr. Morales.

8 de febrero de 1979. Me entrevisté de nuevo con el Dr. Morales y le encontré sereno, más alegre y abierto. Fue en este clima de feliz intimidad, en contestación a mis preguntas directas el doctor, muy abiertamente, afirmó varias veces que él aceptaba el hecho de que lo sobrenatural estaba presente en Garabandal y que los mensajes ciertamente venían de Dios.

Asimismo me explicó como, un mes antes de morir de cáncer su esposa en una clínica, él había pedido prestado un crucifijo besado por la Santísima Virgen en Garabandal a otro paciente canceroso. El doctor explicó como le habían desaparecido los dolores a su esposa y como ella había permanecido en una paz interior hasta el fin. Aquí apuntó con evidente alegría como el otro paciente de cáncer que le había prestado el crucifijo se recobró totalmente, que en palabras del Dr. Morales fue un verdadero milagro. Ahora trabaja en un banco.

Esta editorial debe ser suficiente por el momento para iluminar a los lectores respecto a la posición de la Iglesia sobre Garabandal. Para comprender la aparentemente larga espera de las autoridades eclesiásticas en pronunciar su juicio, es bueno recordar que desde el tiempo de las apariciones de Fátima en 1917, la Iglesia nunca habló hasta el año 1930, cuando el Obispo de Leiría hizo un corto anuncio oficial sobre el respecto.

Firmado: P. Francisco A. Benac S.J.
Bombay, India.

 

A. M. D. G.

 


 

Índice de capítulos