Las Apariciones de la Virgen María en San Sebastián de Garabandal

Capítulo 60

El beso de nuestra Madre María.

P. Ivan Shmadylo, OSBM.

Superior del Monasterio Basiliano
de Yasna Hora en Hoshiv, Ucrania.

Curación de Natalia Dmytrivna.

Por medio del beso que he dado, mi Hijo hará prodigios.

 

¡Ven a María!

Veinte mil peregrinos se reunieron en el Monasterio Basiliano de Yasna Hora, en Hoshiv, Ucrania, para venerar y besar la medalla besada por nuestra Madre en Garabandal.

Dice el Padre Ivan Shmadylo, OSBM, Superior del Monasterio Basiliano de Yasna Hora en Hoshiv, Ucrania:

¡Ven a María, búsquela a Ella!.

En ruta hacia Yasna Hora, desde la entrada a la villa de Hoshiv, Ucrania, se ven las blancas paredes y las cúpulas doradas del Monasterio Basiliano de la Transfiguración de Nuestro Señor.

 ¡Alma cristiana!. Cuando usted se encuentre con problemas, porque la vida es un camino de espinas, cuando le parece que el mundo entero está contra usted y no hay ayuda a la vista, no caiga en la desesperación. Vaya a María, búsquela a Ella.

La Reina de las Montañas Cárpatas, en Su adorable y apacible bondad, le espera en este Santuario de Peregrinación Mariana, en el que Dios nos acoge por medio de nuestra Bendita Madre. Ella lo espera aquí para curar las heridas de su alma, para llenarlo generosamente del tesoro de las gracias de Dios.

Recordemos las palabras del Papa Pio IX:

-- Dios hizo a María, el tesoro de toda la gracia, que todos pueden obtener por Su intercesión y ayuda. Cada esperanza, cada gracia y la salvación, vienen por la intercesión de la Bendita Virgen María.

Recordemos las profecías y los mensajes dados por la Madre de Dios en los años de 1961 a 1965 en Garabandal, España, donde Ella apareció para la salvación de la humanidad.

Recordemos los millares de curaciones milagrosas del cuerpo y el alma que Nuestra Bendita Madre ha otorgado a paralíticos, mutilados y personas gravemente enfermas que han estado viniendo a Ella, a través de los siglos, con la esperanza y la fe, aquí en Yasna Hora, en Hoshiv.

Hace dos meses, durante una vigilia, unos veinte mil peregrinos se reunieron en este Monasterio Basiliano de Yasna Hora, en Hoshiv, para besar las medallas con el beso dado por Nuestra Madre en Garabandal.

Se celebraron Misas durante todo el día. Millares de personas recibieron los Sacramentos de Reconciliación y la Santa Eucaristía. Era una ocasión extraordinaria; todos esperaban a Michael y Helen Rozeluk, que venían con sus medallas besadas por la Bendita Madre en Garabandal.

Este matrimonio canadiense, el marido y la esposa, recibieron una gran gracia de Dios: la recuperación completa del doctor Michael de una enfermedad incurable durante su peregrinación a Garabandal, España, el sitio de las Apariciones de Nuestra Señora del Monte Carmelo.

Desde entonces, Helen y Michael, después de sus obligaciones de cada día, dedican todo su tiempo a dar a conocer las Apariciones y Mensajes de la Santísima Virgen en Garabandal y a la curación de enfermos e incapacitados con las medallas besadas por nuestra Bendita Madre durante sus apariciones en Garabandal.

Los Sacerdotes Basilianos, durante dos días enteros y dos vigilias, en septiembre de 2002, atendieron a los peregrinos que llegaban, preparándolos para las oraciones de Sanación.

El padre Zenovy Kasko, párroco de la villa de Radcha vino con Michael y Helen Rozeluk, así como Luba y Bohdan Shyptur. Bohdan Shyptur fue quien organizó las visitas y los horarios.

Celebramos una "Moleben", una hermosa liturgia dedicada a la Santísima Virgen y a continuación desde las 17:00 horas hasta las 12:30 de la mañana, Helen y Michael, junto con los Sacerdotes Basilianos y Hermanos, atendieron a la gente que, por su gran fe y amor, fueron llenos de las bendiciones de Dios.

Dos corrientes interminables de personas se extendían desde la iglesia hasta las puertas de entrada del Monasterio. Rezando y meditando, venían con gran fe. En todos se notaba la presencia de la Gracia de Dios. Se oían las oraciones de los enfermos e incapacitados en sillones de ruedas y de las personas que los acompañaban.

Los peregrinos recuerdan a Helen y Michael como hombres de gran fe y espiritualidad profunda en sus Oraciones.

Con un respeto extraordinario para las personas, rezaban a Dios y a su Bendita Madre por todos, con la confianza de que Dios da a todos su Gracia, la Gracia del Beso de nuestra Madre del Cielo para quienes besan las medallas con el beso de la Madre María.

Foto: Michael y Helen en el Santuario de Yasna Hora. En lo alto, la hermosa imágen de de la barca de Pedro, recogiendo la red.

Aún hoy, con lágrimas en los ojos, recuerdo cómo una mujer enferma, incapacitada, a quien sus parientes han estado trayendo a Hoshiv todos los domingos y días de fiesta durante los últimos diez años, salió andando por sí misma.

Después de besar la medalla besada por la Bendita Madre en Garabandal, y rezando todos con Helen, se levantó de su silla de ruedas y se valió por sí misma, a pesar de sus débiles, finas y casi esqueléticas piernas y salió andando.

Miles de personas presenciaron este milagro de Nuestra Señora mientras las lágrimas de alegría corrían por las mejillas de los peregrinos.

Hubo otro caso muy especial. Trajeron a una mujer joven, poseída del demonio. Michael rezaba con gran fe, convicción y amor. Los Sacerdotes habían estado orando por ella. La mujer se condolía, torturada por aquella posesión. Cuando Michael colocó su medalla besada por la Bendita Madre en Garabandal, en la frente de la mujer, por el poder de la Virgen Inmaculada, el demonio abandonó a la poseida, quedando ella sana.

Los Sacerdotes la llevaron a la iglesia, donde recibió los Sacramentos de Reconciliación y la Santa Comunión. La gente estaba llena de alegría y se rezaron oraciones de accion de gracias a Dios.

Las maravillas de esa tarde celestial en Yasna Hora fueron innumerables. Nuestra gratitud  a todos. Es hora de proclamar fuertemente y públicamente: "¡Ven a María!".

La Señora de Yasna Hora, Reina de las montañas Cárpatas, espera cada día a las almas necesitadas de curación y descanso, aquí en Hoshiv.

Nuestra gratitud a Michael y Helen Rozeluk, por dar todo de sí mismos tan generosamente y gratuitamente para dar a conocer las Apariciones y Mensajes de Nuestra Señora del Monte Carmelo de Garabandal, llevando la gracia de Su beso por el mundo y también, especialmente, por su obsequio al Monasterio Basiliano en Hoshiv, de una medalla con el Beso de Nuestra Señora.

Estimada alma peregrina, escoge el único camino de salvación: el camino de la lucha contra el pecado, el camino de la Oración y la Penitencia. ¡Vayamos juntos a María en Yasna Hora!.

P. Ivan Shmadylo, OSBM.
Superior de Monasterio Basiliano de Hoshiv, Ucrania
Diciembre, 2002.

 

Curación de Natalia Dmytrivna.

 

Natalia cura milagrosamente.

Mi nombre es Natalia Dmytrivna Bodnar, de la villa de Sydorivka, provincia de Lviv, Ucrania. Nací en 1972. Soy cristiana creyente. He oido mucho acerca de los milagros de Dios, pero nunca lo entendí bien hasta que lo viví en mí misma.

El 23 de septiembre de 2002, me vino repentinamente un fuerte dolor en la columna. Pensé: "tengo algo mal en mi espina dorsal". Fui a un neurólogo y me diagnosticó: mialgia lumbar en la parte baja de la columna.

El dolor no era severo pero sí muy incómodo. Era totalmente incapaz de agacharme. Me era muy difícil andar o acostarme. El tratamiento consistió en pastillas e inyecciones para el alivio del dolor.

De profesión, soy una enfermera titulada, pero tengo aversión a las inyecciones. Con los medicamentos no cambió mi estado.

El 25 de septiembre de 2002 viajé a la Catedral de la Santa Resurrección en Ivano Frankivsk, donde Michael y Helen tenían una presentación sobre las Apariciones de Garabandal y oraban sobre las personas con sus medallas besadas en Garabandal.

Había un gran número de personas presentes allí en la Catedral. Era apenas capaz de estar en pie y, a decir verdad, deseaba no haber venido.

En la Catedral, confesé y recibí la Santa Comunión. Después de la presentación y la Oración general de Michael, yo no sentí nada y llegué a estar desilusionada.

Luego me acerqué a Helen para la Oración personal. En el momento que la medalla besada por la Bendita Madre me fue colocada en la frente y mientras Helen rezaba, sucedió un milagro maravilloso.

Recuerdo las palabras de Helen:

-- "No tenga miedo, Jesús está con usted".

Entonces me senté en una silla y era como si mi columna ya no tuviese dolor. Me moví, me agaché y mi columna ya no me dolía.

¡Pero yo todavía no creí hasta que volví a casa!. Me desperté al dia siguiente sin dolor. Era capaz de trabajar como antes de mi enfermedad. Fue entonces que creí sinceramente en el poder de Dios. Dios todo lo puede.

Pido sinceramente a Jesucristo y a Nuestra Bendita Madre que me siga dando fuerzas y perseverancia para ayudar a la gente, para ayudar a otras personas enfermas. Cuando acudimos a Dios y su Madre María, ellos nos escuchan siempre.

¡Gloria a Jesucristo!.

Natalia D. Bodnar
Sydorivka, Ucrania.

 

A. M. D. G.

 


 

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