Las Apariciones de la Virgen María en San Sebastián de Garabandal

 

Capítulo 55

 

Los Objetos Besados por la Virgen.

¡Un regalo maravilloso de la Bendita Madre!

I

¡Qué regalo nos has dado, querida Madre María!.

Viaje a Ucrania, primera parte.

Helen y Michael con el Obispo Cornelio Pasichny de la Diócesis Católica Ucraniana de Toronto, poco antes del viaje a Ucrania.

 

Dios colmó de gracias el viaje que Michael y Helen Rozeluk hicieron a Ucrania para difundir el mensaje de nuestra Bendita Madre en Garabandal. Dios premia con grandes gracias lo que se hace a favor de las Apariciones de su Madre en Garabandal.

 

El doctor Michael y Helen Rozeluk dan gracias a nuestra Bendita Madre.

Dice Helen y Michael:

Quién se podría haber imaginado las maravillas que veríamos, como resultado del Beso de nuestra Madre en Garabandal, durante nuestro viaje a Ucrania, un viaje organizado por Usted, querida Madre, usted misma, para la gloria de Su Hijo Jesús.

¡Gracias por un viaje que nosotros nunca nos olvidaremos!; un viaje de amor, un viaje donde Sus hijos vinieron para recibir Su beso. Sí, querida Madre María, Su beso viaja a través del mundo y, una vez más, Sus palabras se han cumplido:

"Mi Hijo, por medio de este beso que yo he dado aquí, hará prodigios, repártelos a los demás."

¡Que verdad más maravillosa fueron estas palabras!.
 ¡Alabado sea el Señor!

 

Nuestro viaje a Ucrania en septiembre de 2002.

Después de lo que vivimos allí, nos hemos dado cuenta de que este viaje fue una maravillosa obra de la Providencia Divina. Todo lo que se hizo en este viaje fue en respuesta a gracias recibidas y todo se hizo para Gloria de Dios, por el gran amor que Dios y su Bendita Madre nos tienen.

Cuando Joey Lomangino publicó el video el "El Mensaje de Garabandal" en 1994, Helen lo tradujo al ucraniano.

Foto: Yuri Shymko y cardenal Lubachivsky con el video "El Mensaje de Garabandal" en la mano.

En aquel momento, Joey pidió también que nosotros llegáramos a ser el Centro canadiense de Garabandal. El dijo también algo muy profético: que nuestra principal misión sería la de dar a conocer el mensaje de Nuestra Señora de Garabandal en Ucrania. Encontramos su declaración no sólo extraña, pero también muy improbable. ¡Vemos ahora que Joey tenía razón!.

Cuando salió el video en ucraniano, fue presentado oficialmente en enero de 1995 al entonces arzobispo de Ucrania, Lubomyr Cardenal Lubachivsky en Lviv por Yuri Shymko, que fue diputado del Parlamento Canadiense y Presidente del Congreso Mundial Ucraniano.

El Cardenal, después de verlo, consiguió que el video "El Mensaje de Garabandal" fuese puesto en la televisión pública. Desde entonces, el video y el mensaje de Nuestra Señora se han extendido de manera prodigiosa por Ucrania así como por norte américa.

Después de mi curación milagrosa en Garabandal, después de ocho años de constantes dolores y sin perspectiva alguna de curación, mi esposa Helen y yo, empezamos a compartir nuestra maravillosa historia con amigos.

La impresionante curación del doctor Michael Rozeluk está detallada en el capítulo 12 de esta historia.

Esto se convirtió gradualmente en un apostolado repleto de compromisos para hablar en público. Nosotros siempre hemos pedido a las autoridades locales de la iglesia su aprobación y permiso, antes de hacer alguna presentación pública acerca de Garabandal.

Por el poder de Dios, por medio de curaciones y conversiones, el Mensaje de la Madre de Dios se abre paso hacia Ucrania. Todo empezó con el viaje de Joey Lomangino a Canadá, la curación de Michael Rozeluk y el apoyo entusiasta de su Obispo, monseñor Roman Danylak.

Un paso más fue la curación de Bohdam Shyptur.

Hace varios años, hablámos en la Catedral Católica Ucraniana de San Josaphat en Toronto. Bohdan Shyptur, un compositor ucraniano de música que visitaba Toronto, vino a la Misa y a la Oración de Sanación.

Bohdan tenía muchísimo dolor de espalda, alergias y un problema grave de corazón. Se confesó esa noche y fue curado completamente durante la sanación por mediación de nuestra Madre Bendita de Garabandal.

Desde ese día, Bohdan nos propuso visitar Ucrania para dar a conocer las Apariciones y mensajes de la Virgen de Garabandal.

Cuando finalmente accedimos a ir, en el otoño del 2002, fue Bohdam el que hizo todo el trabajo, pidiendo permiso a su obispo y después arreglando nuestros horarios de visitas, que iba a ser durante dos semanas enteras, a varias parroquias y comunidades de su provincia.

A nuestra llegada a Ucrania, Bohdam fue nuestro anfitrión, el chófer, el director y el guardaespaldas todo en uno. Una cosa le preocupó, el no tener contactos en Lviv, la capital de Ucrania Occidental, donde planeaba la última parte de nuestro viaje. Sin embargo, eso no era un problema para Nuestra Señora. ¡Ella lo arregló todo!.

Un mes antes de nuestro viaje, Helen y yo fuimos invitados a hablar en el Monasterio de la Madre de Dios en Orangeville, norte de Toronto. Hubo una curación milagrosa allí de un señor que tenia contactos en Lviv y nos arregló la parte final del viaje.

 

El libro de Petro Hrynchychyn se difunde rápidamente por Ucrania.

El día siguiente, después de su propia curación en S. Josaphat, en Toronto, Bohdan Shyptur compartió sus buenas noticias con un amigo suyo, Petro Hrynchychyn, un director de teatro, que tenía también un problema grave de espalda.

Petro vino la semana siguiente a S. Josaphat, se confesó y también fue curado milagrosamente al besar la medalla de Nuestra Señora de Garabandal. Además de esta curación física, tuvo una conversión profunda de corazón que le impulsó a estudiar las Apariciones de Nuestra Señora a través de la historia y a escribir un libro acerca de María.

Poco después, en el año 2000, su libro, "De Zarvanytsia a Garabandal", fue publicado en Ucrania y se vendió completamente en poco tiempo. En el libro, Petro incluyó no sólo la historia de las Apariciones de Garabandal sino también la historia de mi curación en Garabandal y nuestro, mío y de Helen, apostolado subsiguiente, también el testimonio de su propia curación milagrosa.

El libro de Petro va ahora de lector en lector en Ucrania y una segunda publicación está en camino.  De hecho, mientras estábamos allí, muchas personas vinieron de lejos con estos libros en sus manos.

Helen y Michael con el Obispo Cornelio Pasichny de la Diócesis Católica Ucraniana de Toronto, poco antes del viaje a Ucrania.

 

El Obispo Cornelio nos da su apoyo.

Poco antes de salir para Ucrania, nuestro propio obispo en Toronto, el Obispo Cornelio Pasichny nos dió una carta oficial de recomendación para presentarla a todos los obispos y sacerdotes. Él mismo, mientras estuvo en Ucrania, un par de meses antes, habló acerca de nosotros con los Obispos de la zona.

Nuestra Señora reavivó de nuevo el fervor religioso de las gentes de Ucrania. Ella quiso recordar que ellos son especialmente amados de su Corazón. Este país, en el año 1015, fue uno de los primeros en ser consagrado oficialmente a la Bendita Madre por el monarca reinante, el príncipe Yaroslav el Sabio de Kyiv.

Otro acontecimiento memorable fue la visita del Papa Juan Pablo II.

En el verano de 2001, el acontecimiento mas importante fue la visita a Ucrania del santo Padre, el Papa Juan Pablo II. El recibimiento de la gente de Ucrania Occidental fue increible. Su visita cambió el país. El santo Padre reafirma y bendice el amor de los Ucranianos a su Madre María y su amor por el Rosario.

Al aceptar la invitación para hablar en Ucrania, nos dimos cuenta de que habría muchas necesidades. Necesitaríamos algún tipo de proyector de video para mostrar la película documental de Garabandal en reuniones grandes. Necesitaríamos una cantidad grande de material impreso. Necesitamos también muchos rosarios. Sabíamos que si nuestra Madre María quería este viaje, Ella cuidaría también de todo lo necesario.

Asi fué; nos llegó un paquete de nuestros amigos en los EEUU, Bob y Donna, conteniendo 350 rosarios. Al dia siguiente, Olga llamó diciendo que ella había conseguido mil rosarios del Día Mundial de la Juventud aquí en Toronto. Monseñor Lacey, el Obispo jubilado de Toronto, nos dió otros mil. Todo esto sucedió en cuatro días. ¡Todo lo que se fue necesitando fue llegando y cada gasto se cubrió completamente!. ¡Incluso el proyector de video, que necesitábamos!

Llegada a Ucrania.

Llegamos a Ucrania el 20 de septiembre de 2002, en el aeropuerto de Lviv. Fuimos recibidos por varios miembros de la familia y por nuestros organizadores del viaje. Después de una visita breve a los primos y familia, fuimos a la ciudad de Ivano Frankivsk donde pasamos la noche en la casa de Shyptur.

El día siguiente, el sábado, 21 de septiembre, tuvimos una entrevista de la televisión. Antes de nuestra llegada, las estaciones locales de la televisión ya habían televisado el video documental sobre Garabandal por dos veces. Había también artículos periodísticos que anunciaban nuestra llegada y nuestro itinerario.

El sábado por la tarde hablamos en la villa de Radcha, cercana a Ivano Frankivsk. Esta primera presentación era para los niños de esa área. Cuando nosotros llegamos, había sobre 800 niños junto con sus padres y abuelos; en total, unas 1500 personas.

Nos presentó el párroco, P. Zenovy Kasko, y celebró una Moleben, una liturgia dedicada a la Madre María, seguida del rezo del Rosario, mientras los sacerdotes de otras parroquias oían las confesiones.

Después hablamos acerca de Garabandal y dimos a besar la medalla de Nuestra Señora. Mientras los niños vinieron a venerar la medalla, los adultos fueron al vestíbulo a ver el video documental sobre las Apariciones de Garabandal.

En Radcha con el párroco P. Zenovy Kasko,
en el dia especial para los niños.

Muchos niños estaban muy enfermos; nos los traían sus padres para recibir el consuelo del Beso de Nuestra Señora. Un chico de 12 años estaba paralítico de la cintura hacia abajo; fue traido por sus padres.

Cuando besó la medalla dije a todos que rezasen el "Padre Nuestro" y el "Avemaría". Cuando terminamos de orar por él, el niño ya se valió por sí mismo y pudo caminar. La gente lloraba. Su madre lloraba cuando finalmente anduvo hacia ella por sí mismo.

¡Ella le esperaba allí con sus brazos extendidos y él anduvo por si mismo a sus brazos!. ¡Todos lloraban y también yo!. El chico y los padres volvieron a su casa, andando juntos de la mano. ¡Alabado sea el Señor!. Era el primero de los muchos milagros maravillosos que Dios realizó por la mediación de Nuestra Señora.

Después de este suceso, la multitud vino, aún más fervorosa, a venerar la medalla besada por Nuestra Señora. Ellos habían presenciado el Amor de Dios y su poder.

Un chico tenía un brazo retorcido de una manera extraña. No podía usarlo porque estaba paralizado. Él besó la medalla de Nuestra Señora y rezamos por él allí, delante del Santísimo. Entonces le pedí que moviera el brazo. ¡Repentinamente, el brazo se puso derecho y se movió libremente!. El lo movió arriba y abajo. ¡La alegría de su cara era algo digno de verse!.

Parte de los hechos relatados aquí tuvieron lugar en el edificio contiguo a la Iglesia, donde el párroco tenía el campanario de la Iglesia y una pequeña capilla con el Santísimo. La Iglesia parroquial estaba en obras y por esto la gente tuvo que acomodarse, incluso al aire libre.

Toda la tarde y hasta bien entrada la noche continuaron las oraciones y la veneración de la medalla de Nuestra Señora hasta que todos la besaron. Ya eran las primeras horas de la madrugada del domingo. El Padre Zenovy nos llevó a su hogar para la cena. ¡Qué tarde nos había deparado el Señor  para todos nosotros!.

El día siguiente, el domingo, 22 de septiembre de 2002, volvimos a la villa de Radcha para la Santa Misa de las 9:30 de la mañana. Cuando nos acercábamos a la aldea en coche, vimos centenares de personas que venían de lejos. Algunos venían en sillas de ruedas, otros con muletas, y esto viniendo de lejos.

Cuando llegamos para la Santa Misa, al aire libre, había unas dos mil personas allí. Las noticias de los milagros de nuestra Señora ya se habían extendido.

 

Después de la Misa, el Padre Zenovy nos presentó y nos invitó a hablar a la gente. Hablamos sobre Garabandal, sobre las Apariciones, sobre nuestra visita al pueblo y de lo que nos aconteció.

 Les dijimos que todos podían venir y besar la medalla en el lugar designado por el párroco. P. Zenovy pidió oraciones por una señorita en una silla de ruedas. Llevaba unos 24 años paralítica.

Besó la medalla de Nuestra Señora. Pedí que la gente rezase el Rosario. Entonces me arrodillé delante de ella y la dije que andase conmigo. ¡Sucedió una cosa asombrosa: se levantó y anduvo conmigo!. ¡Todos lo vieron!. ¡La gente lloraba de alegría al ver el milagro que Dios había hecho!.

El Padre entonces me tomó para visitar a los enfermos de la aldea. Fuimos de casa en casa y rezamos por ellos. Con P. Zenovy visitamos a varias personas en sus hogares.

Un hombre de unos 30 años, yacía en el piso de su habitación. Durante varios días había estado muy débil e incapaz de levantarse. Sus padres y parientes lloraban y oraban por él cuando entramos. El Padre pidió que se levantase pero él no pudo.

Le dejamos, pero pedimos a la familia de continuar rezando por él. Más tarde, en este día, supimos que este hombre se levantó y pudo estar de pie durante mucho tiempo. Después salió fuera de su casa y anduvo alrededor e incluso se sentó en el coche de la familia. Su familia estaba entusiasmada.

Cuando el Padre y yo regresamos, había una multitud inmensa que trataba de entrar para ver a Helen con su medalla. Cuando nosotros llegamos, Helen había terminado de rezar por un chico de unos siete años, cuyo brazo derecho estaba paralítico de nacimiento.

El brazo derecho tenía la mitad del tamaño del otro. Helen colocó la medalla en la mano del muchacho y rezamos por él. Preguntó al chico si podía mover los dedos. Y él los movió. Entonces le pidió que moviese la mano. ¡Y él lo hizo!.

Entonces ella pidió que levantara el brazo arriba y abajo. ¡Y él lo hizo!. Cuando el Padre Zenovy se enteró de lo que acababa de suceder, tomó al niño en sus brazos. El chico puso sus brazos alrededor del cuello del P. Zenovy. El Padre, con lágrimas en los ojos, llevó al chico a Nuestro Señor en el Sagrario y rezamos en acción de gracias por este grandísimo milagro.

El padre conocía a este chico y sabía que tenía su brazo derecho paralizado. Ahora el chico podía mover su brazo normalmente. ¡Fue otra curación milagrosa por el Beso de Nuestra Señora, tal como Ella lo había prometido!.

Las oraciones continuaron hasta que el Padre dijo que nosotros teníamos que ir a nuestra cita con el Obispo local, el Obispo Sophronius Mudry en Ivano Frankivsk. Tomamos un almuerzo ligero y algo de beber y fuimos al encuentro con el Obispo.

 

Continúa en la Segunda Parte ...

 

A. M. D. G.

 


 

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